En 1944 comienza el proyecto del Hotel Antumalal con un salón de té a las orillas del Lago Villarrica.
Catalina Pollak y su madre Davita deleitaron con sus recetas tradicionales, de kuchenes y tortas, aprendidas en su lejana Praga, a los clientes que llegaban en lancha por el lago desde Pucon.
El nombre Antumalal, que en Mapudungun (lengua mapuche), significa “Corral del Sol”, surge de contemplar las puestas de sol que se apreciaban en este salón de té.
Un día llegó hasta este salón de té el Presidente de Chile, Don Gabriel González Videla. Don Guillermo Pollak, se acercó al Presidente con una petición para facilitar un préstamo con el que se iniciaría la construcción del Hotel.
Fue accedido por Videla un préstamo Corfo y así nació el Hotel Antumalal.
Concebido en los años 40 e influido por el estilo Bauhaus & de Frank Lloyd Wright, con un diseño y líneas del Antumalal que cautivan a los huéspedes hasta el día de hoy. Guillermo Pollak y el arquitecto Jorge Elton se inspiraron en esta casa en Algarrobo para iniciar el proyecto.
La relación de Jorge Elton con Guillermo Pollak comenzó en ese entonces y se convirtieron en grandes amigos.
El hotel que usted disfruta hoy es un testimonio de la perseverancia de Guillermo y Catalina.
Conforme los años iban pasando, la reputación del Hotel Antumalal iba creciendo y se convirtió en el primer lodge de pesca y uno de los mejores destinos hoteleros en Chile.
A lo largo de los años se han hospedado importantes huéspedes como la Reina Isabel de Inglaterra, Neil Armstrong, James Stewart, Barry Goldwater, Emma Thompson e Isabel Allende, la escritora.
Mantener la línea arquitectónica mientras modernizamos las instalaciones es un desafío que el Antumalal abraza exitosamente.
La adición del Spa Antumaco, en 2010, demuestra el esfuerzo por mantener la arquitectura original usando madera, roca y cemento para integrarse a la naturaleza.
Gracias a este compromiso, el hotel sigue siendo una joya arquitectónica y representa un tributo hotelero turístico para Chile y Pucón, habiendo marcado el paso pionero en su desarrollo como centro de turismo.
Los jardines privados del Antumalal ocupan 5 hectáreas sobre el lago ofreciendo admirables vistas panorámicas en un espacio privilegiado.
Caminar por los senderos, los miradores, el huerto y las playas del parque agregan un valor a tu estadía que destaca al Antumalal de los demás hoteles en Pucón y en Chile.
Predomina la vegetación nativa compuesta por cinco cascadas con piletas naturales de roca volcánica y paños de flores cuyos colores y aromas cambian con cada estación del año.
Hoy, la tradición familiar y la magia de Antumalal continúan con la tercera generación de la familia, junto con su reputación de un servicio personalizado deleitando a viajeros de todo el mundo.